
Esta decisión, poco democrática y restrictiva, no permite que otros/as estudiantes, graduados/as y docentes pueden participar y hacer escuchar su voz. ¿Acaso alguien que no se sienta representado/a por uno de los espacios políticos que integra la Junta no tiene el derecho de hacer escuchar voz? ¿Acaso no tienen derecho estudiantes, graduados/as y docentes a realizar un pedido de palabra?